sábado, 11 de octubre de 2014

Ayúdate a ti mismo.

 ¡Buenas! Me estoy dando cuenta de que esto se está convirtiendo en algo muy profundo y la verdad es que yo no me paso todo el día como un alma en pena, que quede claro que lo mejor de esta vida es pensar en positivo y en vez de pensar en lo malo que tenemos, es mejor pensar en lo bueno que está por venir.
 Pero como siempre ya me estoy enrollando y yo quería venir a hablar sobre el tema universal, los consejos. 
 Cuando un amigo, un familiar, o en definitiva una persona que nos importa viene a contarnos sus problemas, a que le escuchemos y a esperar que le demos un buen consejo, nosotros sin duda se lo damos, le decimos desde un punto de vista objetivo lo que es mejor para él/ella, lo que debería hacer sin ninguna duda porque se está equivocando, etc...
 Pero luego nos damos cuenta de que todos esos consejos que somos capaces de dar a esas personas, no podemos ponerlos en práctica nosotros mismos, no sabemos que hacer con nuestras vidas cada vez que pasamos por una situación así, y de nuevo, acudimos a alguien para que nos ayude y esa persona, a su vez, no sabría hacer por si misma lo que nos está diciendo que hagamos. 
 Así que el problema está en que nunca somos lo suficientemente fuertes, o mejor dicho, nunca somos lo suficientemente valientes para vencer a nuestra mente y a nuestros sentimientos. Porque en el fondo siempre sabemos perfectamente que es lo que deberíamos hacer, pero siempre necesitamos que alguien cercano esté de acuerdo o que piense lo mismo que nosotros. 
 Creo que aquí la solución debería ser aprender a ser fuertes mentalmente, a saber que es lo correcto en cada momento y en los momentos más serios y duros, tener claro que a lo mejor tenemos que sufrir un poco para que en el futuro seamos más felices. 


  Porque siempre sabemos dar buenos consejos a los demás y nunca sabemos que hacer con nuestra vida. 



See you. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario